Cuando una persona sufre una parada cardiorespiratoria las posibilidades de supervivencia aumentarán si se dispone de medidas de emergencia y de cierto conocimiento sobre cómo actuar.

Y ese cómo actuar se basa en cuatro pasos que comprenden la llamada cadena de supervivencia.

¿Sabes qué es la cadena de supervivencia?

Cuando hablamos de cadena de supervivencia nos referimos a los pasos que hay que seguir para que aumenten las posibilidades de supervivencia de una persona tras sufrir una parada cardiorespiratoria. En esta cadena de supervivencia es fundamental contar con un DESA o desfibrilador externo semiautomático. Este dispositivo nos permitirá suministrar una desfibrilación para recuperar el latido cardíaco, siempre después de haber seguido los dos primeros pasos, que son:

  1. Reconocimiento precoz de la situación de emergencia y solicitud de ayuda a los servicios médicos de emergencia
  2. Maniobra de reanimación cardiorrespiratoria precoz practicada por los testigos de la parada cardíaca
  3. Desfibrilación temprana para recuperar el latido cardíaco con el DESA
  4. Soporte vital avanzado y cuidados posteriores a la resucitación

Eso por eso que desde Fundación SSG fomentamos la cardioprotección de espacios, una pieza clave para que la cadena de supervivencia pueda llevarse a cabo.

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